martes, 9 de febrero de 2016

Una manita

Querida Helena,


Existe un símil que se utiliza en el deporte rey para denotar el número cinco, una mano abierta mostrando los cinco dedos. Así me quiero imaginar como nos dirías cuantos son los años que hoy cumplirías. Una carita sonriente, un bracito extendido y una manita calida, abierta, sin ambages, mostrando al mundo que tal día como hoy cinco años atras, viniste a este mundo.




No sé si es la falta de sueño, o no tener a tu madre cerca o quizás sea la redondez de esa cifra, pero hoy me está costando más no poder sentirte. Me encuentro lejos de casa, y aunque no estoy sólo ( mi hermano del alma está aquí a mi vera), si que tengo más tiempo para pensar, para asomarme a ese abismo que la vorágine del día a día relega al oscuro rincón del pensamiento más privado.



Sólo cuando uno se encuentra a solas con sus pensamientos, es cuando las heridas más profundas vuelven a abrirse y el dolor vuelve a inundarlo todo.



Pero no sufras. No tenerte duele, pero me hace sentir vivo y me trae a la mente, el olor de tu piel, el negro de tus ojos y esa manita que nunca quise dejar marchar y que hoy me dice que ya son cinco los años que han pasado desde que te sostube en mis brazos por primera vez.



Tu padre que te quiere.

1 comentario:

  1. Hola Helena
    Hoy es uno de esos días que el cielo luce diferente. Te echamos de menos.

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