martes, 20 de diciembre de 2011

5 meses son toda una vida

Querida Helena,

Hoy hace 5 meses que cerraste los ojos para no volver a abrirlos jamás, 5 meses desde la última vez que mis brazos te sostuvieron y pude apretarte contra mi pecho, 5 meses desde la última vez que sentí latir tu fuerte corazón y te oí respirar, y hoy, al igual que aquel día, mis ojos se llenan de lágrimas al rememorar la pena de no tenerte conmigo más.

viernes, 9 de diciembre de 2011

El hogar más allá del mar.


Querida Helena,

Te escribo, esta vez, desde un lugar lejano, tanto en el espacio como en el tiempo. Un lugar, que aún estando lejos de casa, me hace sentir como en el hogar. Un lugar que guarda mis primeros recuerdos como adulto y los últimos de adolescencia. Un lugar donde tu madre y yo comenzamos a formar el hogar al que llegaste y tan pronto te fuiste.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Tiempo para reflexionar

Querida Helena,

No me gusta hablar de política, en especial porque mi visión particular de la misma se separa de las corrientes establecidas a mi alrededor, y nos guste o no, a todos nos gusta encajar. Pero como hoy, día en que se cumplen cuatro meses de tu partida, los españoles tenemos el derecho a votar a aquellos que nos gobernaran, creo que dedicaré unos minutos a hablarte del cansancio que supone ver como a todos nos da igual quienes ocupen los ministerios, ya que en el fondo son todos iguales.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Otoño y melancolía

Querida Helena,

El otoño nos ha alcanzado por fin, y por mucho que me pese, he de reconocer que mi estado anímico no era tan bueno como yo mismo pensaba. Hasta no hace mucho el sol brillaba en un cielo limpio y sin nubes, la temperatura era agradable y la manga corta seguía reinando en mi armario. Pero como un ratero vil que se esconde tras una esquina, el otoño nos ha sorprendido a todos y de pronto el sol se ha ocultado tras un manto de nubes grises, el termómetro se ha desplomado y chaquetas y abrigos se han hecho dueños de las calles.

miércoles, 2 de noviembre de 2011

A la luz de una pequeña mariposa

Querida Helena,

Hoy es 2 de Noviembre, Día de Difuntos.

Hoy, aunque parezca mentira, los cementerios se llenan de personas que se dedican a adecentar las tumbas y nichos, a cambiar las flores que llevan tanto tiempo marchitas y sobre todo a rezar y llorar por aquellos que ya no están entre nosostros

jueves, 20 de octubre de 2011

Castillos de arena

Querida Helena,

Muchas veces cuando voy a la playa me sorprendo a mí mismo cogiendo un puñado de arena y dejandola escapar entre mis dedos. En esos momentos mi mente se vacía y todo mi mundo se llena con un único pensamiento, el tiempo se nos escapa y lo hace sin que nosotros podamos siquiera percibirlo, y es sólo cuando nos concentramos lo suficiente y dejamos al margen el resto de cosas, que vemos caer cada uno de esos pequeños granos de arena que forman el reloj de nuestra vida.
 

domingo, 9 de octubre de 2011

El río que se calma

Querida Helena,

Ya son 8 los meses que han pasado desde el día que llegaste hasta nosotros, y en estos 8 meses he tenido tiempo de sentirme el hombre más dichoso del mundo y el más infeliz, el más afortunado y el más desdichado. La rabia me recorría al pensar que teniendo toda la vida por delante, ésta resultó ser tan breve y te nos fuiste cuando aún no te habíamos podido empezar a conocer.

martes, 20 de septiembre de 2011

Rebelión

Querida Helena,

Ya han pasado dos largos meses desde que te fuiste, dos meses en los que parece que haya vivido con más intensidad que los 37 años anteriores. Tu partida me ha abierto los ojos y la vida se me presenta ahora como ese pozo profundo lleno de incertidumbre al que da miedo asomarse. 

viernes, 9 de septiembre de 2011

Mi número de la suerte...

Querida Helena,

Hoy es Viernes 9 de Septiembre, es una fecha cuanto menos especial, ya que tal día como hoy, un Viernes 9 de Septiembre, pero de hace tan solo 17 años, tu madre y yo nos besamos por primera vez.

jueves, 25 de agosto de 2011

Al calor del Sur

Querida Helena

Ya estamos en Guadix, la tierra de tu madre y toda su familia. Es un sitio singular, un oasis verde en medio de un desierto tostado por el sol, una depresión verde en el altiplano que los propios accitanos llaman La Olla.

sábado, 20 de agosto de 2011

Un barquito de cáscara de nuez.

Querida Helena

Hoy hace un mes que decidiste dejar este mundo y embarcarte en la gran aventura de lo desconocido, dejar atrás tu pequeño cuerpo y viajar a lo desconocido.

jueves, 18 de agosto de 2011

El atardecer más bello

Querida Helena,

Hoy vuelvo a escribirte unas cuantas líneas salpicadas por el regusto agridulce de estar en Ayamonte y no tenerte a mi lado. Ahora mismo estoy sentado, junto a tu hermano y tu madre, en la arena de la playa de Isla Canela, el sol, ya bajo, en el horizonte, tiñe las arenas de oro viejo y hace crecer las sombras, que como largos dedos, se afañan en buscar tesoros escondidos bajo la fina arena.

viernes, 29 de julio de 2011

Mare Nostrum

Querida Helena,

Estoy a solas, sentado mirando el cielo gris y plomizo sobre un pinar y me pregunto si desde el cielo podrás verme y si es así, que opinas sobre lo que hoy al atardecer, tu hermano, tu madre y yo nos disponemos a hacer.

sábado, 23 de julio de 2011

Lamentos

Querida Helena,

Esta es la primera carta que te escribo desde que te fuiste, la primera vez que reúno valor para decirte cuanto lamento el haberte perdido, el no tenerte a mi lado, el no sentirte más.

martes, 19 de julio de 2011

Entre mis brazos

Querida Helena,

Probablemente ésta será la primera y última carta que te escriba antes de que emprendas esa gran viaje hacia lo desconocido, antes de que te marches para no volver jamás. 

Sería muy cruel por mi parte no querer volver a hablarte, intentar olvidar el olor de tu pelo, la suavidad de tu piel y la calidez de tu cuerpo cuando te sostengo, desnuda, entre mis brazos. Así que he decidido, enviarte siempre que pueda, una carta.